Amados hermanos.
En Hebreos 11:6 dice lo siguiente: “Pero sin fe es imposible agradar a Dios.”
No son tus talentos, ni tu elocuencia, ni tus logros los que te hacen agradable ante Dios; es tu Fe. El corazón de Dios se inclina totalmente a ti cuando le crees. Creer no es ignorancia, es certeza, es convicción de que Él está y estará siempre en tu vida para ayudarte y para respaldarte.
Acércate a Él creyendo que sus promesas se van a cumplir en ti. Alcanzas tu propósito de vida cuando aprendes a vivir en la fe. Padre amado, oramos hoy: Dame la fuerza y tú poder para vencer los miedos y estar libre de angustias. Quita de mí los miedos que la vida ha puesto en mí. Guía mi corazón y mi mente con la sabiduría que me permita elegir los buenos caminos de Tu voluntad. Confío en que me librarás de la desesperanza, de la dificultad y me darás el valor para no dudar ni temer, porque tendré la certeza de que te encuentras conmigo, siempre. Amén
Dios te bendiga en este día.
Toma un tiempo para orar.
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